Psicoauditación - Sandro Benjamin Cerrate Fernandez
2007
 
Sección Psicointegración y Psicoauditación

Si bien la Psicoauditación es la técnica más idónea para erradicar los engramas conceptuales del Thetán o Yo Superior de la persona, la mayoría de las veces se psicoaudita a thetanes que habitan en planos del Error y sus palabras pueden no ser amigables y/o oportunas para ser tomadas como Mensajes de orientación, algo que sí se da cuando se canaliza a Espíritus de Luz o Espíritus Maestros.
El hecho de publicar estas Psicoauditaciones (con autorización expresa de los consultantes) es simplemente para que todos puedan tener acceso a las mismas y constatar los condicionamientos que producen los implantes engrámicos.
Gracias a Dios, esos implantes son desactivados totalmente con dicha técnica.


Atte: prof. Jorge Olguín.

 

 

Médium: Jorge Olguín.

Gracias por permitirme comunicar con el plano físico.

Me considero un thetán inquisidor. Me considero un Thetán con dudas. Dudas que quizás transmita a mi 10% encarnado. Entiendo el mecanismo del thetán. Sé que el espíritu es concepto, sé que un espíritu sin concepto no es espíritu, y sé que un concepto es el espíritu. Tal vez no sea bien traducido y confunda un poquito este juego de palabras, pero quiero decir como que quiero clarificar mi concepto, reemplazar la confusión por la claridad.

Anhelo llegar al plano cuatro, estoy en el plano tres, y anhelo no transmitirle confusión a mi 10%. Por que si bien mi 10% tiene avidez por crecer, tiene interrogantes, también es cierto que si yo le transmito confusiones, no va a saber que sendero tomar, o va a tomar decisiones apresuradas que luego le van a pesar, o bien va a estar completamente desubicado en cuanto a determinadas tendencias.

He tenido en otras vidas la habilidad de usar experiencias para lograr resultados a favor. Era lo que se llamaba un oportunista. Lo que pasa que, la mente conceptual es distinta a como la ven en el plano terrenal. Por que si yo tuviera que traducir el concepto de oportunista, yo lo tomaría como, en el plano físico, ¿no? como un ser que logra resultados oportunamente. Pero muchas veces esas palabras se mal entienden. Es como aquella persona que la confunden con esa persona que saca ventaja de las cosas, sin importarle nada. O sea que la palabra oportunista no está bien vista por mucha gente. La persona que reparte y se queda con la mejor parte, como decís en el plano físico. Pero yo tengo otro concepto de la palabra. Por lo menos era como me veía yo en una encarnación anterior. Me veía como una persona que estaba predispuesto, y cuando de repente había un negocio lo conseguía.

Pero tenían envidia decenas de amigos, que a mis 32 años no podían entender como podía conseguir resultados económicos tan importantes, y vivían envidiándome, y tirándome vibraciones negativas.

Se burlaban de mi nombre por que decían que era un nombre raro. Yo vivía a kilómetros de Lima Perú. Mi nombre era Elmer, Elmer Gumersindo. De chico seguramente me quedó un engrama del nombre Elmer, y me hacía llamar Gúmer, el diminutivo de Gumersindo.

Era oportunista, lograba sacar plata de las piedras. Lograba sacar dinero de la arena. Sería suerte, sería azar. Ahora como thetán, como parte de espíritu, me doy cuenta que en el plano físico seguramente el azar no existe, lo que existe es la causalidad. Pero mientras otros no lograban nada, yo tenía resultados extraordinarios. Caía en un desierto y caía en medio de un oasis, a tal punto.

Pero me sentía solo. Veía que algunos amigos se acercaban por conveniencia, para sacar alguna ventaja. ¡Esa es la diferencia! Ellos eran ventajistas. Yo era oportunista, que no es lo mismo. Por que si yo les tenía que dar una mano se las daba. Pero me mordían la mano, figurativamente hablando. Siempre me sentí solo, rodeado de amigos, pero solo. Me sentí solo por que se acercaban a mí, no por mí, si no para ver que podían obtener de mí.

Y tuve dos parejas. Dos parejas cortas. Antes de mis 32 años. Que tampoco supe si me querían. Seguramente lo que digo va a obrar en contra mía, por que esto lo estoy transmitiendo en lenguaje hablado, pero era exacerbadamente perverso. Aclaro inmediatamente que es lo que quiero decir. A que le llamaba perversión. Sospechaba de mi segunda pareja. Si estaba con migo por que me amaba, por que me lo decía tres, cuatro veces por hora. Te amo, te amo, te amo. Hasta que un día urdí una mentira. Le dije que hice una mala jugada, y había quedado en la ruina. No pasaron 48 horas que la que era mi pareja se volvió para Cuzco, de donde era su familia (risa). Entonces yo tenía razón. Te amo, te amo, te amo, cuatro veces por hora. Y apenas le digo, he hecho una mala jugada de dinero, y me abandona. Eso es lo que yo quiero decir, que fui perverso, perverso en cuanto a que urdí una mentira. Es una perversión de mentirista.

Gúmer. Me encariñé con ese nombre. Desencarné joven, desencarné a los 49 años. Había nacido en 1899. Desencarné en 1948. Un problema pulmonar. Desencarné en soledad, sin una relación estable, con muchos miedos, y quedé con ese engrama, quedé con ese engrama. Un engrama de soledad, y tengo miedo de transmitirle a mi 10% eso en este momento. Tengo miedo de transmitirle, como una angustia, como que por momentos mi 10% puede sentirse aislado, como que por momentos puede sentirse como que su vida es solitaria. Y como que las cosas si no las termina de lograr, es por que le falta capacidad. Y yo como Thetán puedo afirmar rotundamente que no es así, para nada. Yo mismo sé que como Thetán tengo mucho para dar. Y si no estoy en el plano cuatro es por tantos roles del ego, por que tengo como algunos rencores, a pesar de que yo sé que esa vida en Perú fue un rol más. No pude aceptar la envidia de aquellos que en lugar de apoyarme y quererme, solamente buscaban sacar ventaja. Si con algunos amigos hice lo mismo que hice con mi segunda pareja, de fingir como que ya no tenía posesiones, no, en realidad tal vez yo también tenía parte de culpa por que los utilizaba. ¿Qué significa utilizar? Al pagarles cenas, al pagarles entretenimientos, es como que pagaba mi compañía. Así como ahora en el plano físico se puede contratar una mucama, bueno, yo contrataba amigos. Perdón que sea tan brutal en mi manera de expresarme.

Claro que quedé con engramas. Y claro que tengo mucho trabajo por delante para revertirlos. Esto es un comienzo. Es un comienzo en el cual soy optimista. Y ser optimista es el 50% de la batalla ganada, si los maestros de luz me permiten decir la palabra batalla, por que la digo en el buen sentido. Una batalla donde no se mata a nadie. Es una batalla donde se integran los roles, donde los roles ya no tienen que afectarnos, no tienen que molestarnos.

Bueno, a eso apunto. Y doy gracias a este receptáculo por haberme acogido. Sé que mi receptáculo es un ser de luz y bueno, quiero contagiarme de esa luz. Es lo que puedo decir por ahora, en esta primera traducción a lenguaje hablado de mi humilde concepto.

Hasta todo momento.


Segunda sesión.

Muchas veces los seres encarnados arrastran distintas vivencias, vivencias negativas, porque tal vez de jóvenes o de pequeños tuvieron un trato familiar, quizás no con el entorno directo, pero no muy bueno, o tal vez con amistades que no les comprendían, o tal vez con gente que no hablaban en su mismo idioma. Hablar en su mismo idioma significa compatibilizar, por lo menos en lo que yo interpreto en mi concepto espiritual.

Y percibo, porque converso con otros thetanes, que también distintos 10% encarnados son impregnados celularmente por implantes engrámicos, por desvalorarizaciones, por ser dejados de lado, porque no encuentran una persona que esté a su altura, a su expectativa. Y no lo digo en función de pedantería donde uno piensa que el otro no vale nada. Simplemente que a veces no encontramos, estando encarnados, un interlocutor válido, una persona con la cual se pueda tener una real amistad. Eso también causa engramas. Y eso lo he notado, a parte me lo han conceptuado distintos thetanes, que sus partes encarnadas sufren de estas falencias, que se llaman soledad, incomprensión, aislamiento, u otra situación que también le produzca a la persona desazón. Esa es la primera parte.

Imagínense ustedes esa misma situación potenciada muchísimas veces. Eso es lo que le sucede a los thetanes cuando rememoran diversas vidas, y en esas vidas también sufren las mismas u otras incomprensiones. Sin contar con el agravante de que además en esas vidas pasadas la civilización era más rudimentaria, y las injusticias estaban al orden del día, si se me permite la expresión del plano físico. ¿Cómo no tener engramas de esas vidas?

Obvio que todos los thetanes no tenemos ni los mismos recuerdos ni las mismas vivencias, y tenemos distintas herramientas para enfrentar eso que se puede llamar minusvalía conceptual. Sabemos por experiencia de los maestros principales, por así llamarlos... Al decir principales no se trata de un acto discriminatorio de decir “hay maestros que son mejores de otros”. Interpreto que todo aquel que sirve es útil, como ya lo han dicho distintos seres incluso encarnados. Les llamo principales cuando se contactan permanentemente y que uno ya los tiene como, así como ustedes en el plano físico tienen en algunas ciudades su médico de cabecera, jé, bueno, uno a nivel de thetán también puede tener su guía de cabecera. Y a veces hay ayudantes de guía. La única diferencia que mientras un guía está permanentemente con uno cuando precisa uno determinada directiva u orientación, los que colaboran con este guía pueden rotar. Entonces son espíritus principales en el sentido de que uno ya los conoce. No por nombre, esto ya se ha dicho muchas veces, si no por concepto. Así como ustedes en el plano físico pueden reconocer si tienen buen olfato una flor por su aroma, o una música por determinada melodía, ya saben qué música es, tal de cual, nosotros podemos reconocer a otro espíritu contactándonos con nuestra antenita virtual, con su concepto. Va a vibrar de una manera distinta a los otros millones de espíritus. Y ustedes preguntarán, y entre millones de espíritus ¿pueden reconocer un concepto con esa antenita virtual? Sí. De la misma manera que ustedes entre miles de personas podrían reconocer a un ser querido con vuestra vista. Incluso la persona que carece de vista, lo puede reconocer tocando su rostro con el tacto de sus manos.

Es difícil lo que no se comprende, es difícil lo que no se puede percibir, pero desde ya les digo que es fácil contactarnos entre nosotros, ya sea espíritus completos 100% o entre thetanes, o entre thetán y espíritu. Basta que un espíritu me contacte a nivel conceptual para yo saber de quien se trata. Y si es un espíritu que nunca se ha contactado, también lo voy a conocer en próximas ocasiones.

Recordando lo dicho recién, que cada entidad tiene su herramienta para vencer esos implantes engrámicos, hay thetanes que están en los planes densos y por sus mismos roles del ego, o porque son roles del ego, y a lo mejor es una frase que no se entiende, pero es como que le hacen gozar ese sufrimiento, y no quieren desprenderse de esos engramas. Es como aquellos seres del plano físico que gozan haciendo rol de víctima, porque de alguna manera manipulan al otro. Hay thetanes que tienen tan incorporado hacer ese rol de víctima, o de quejarse de su suerte, y aquí utilizo una palabra del plano físico que no corresponde al plano espiritual pero que suena lindo, y no levantan un dedo para corregir su situación. ¡Jé!, un dedo conceptual, ¿no?

Entonces no es tan sencillo revertir roles del ego, eliminar engramas... Porque ha pasado muchas veces que el 10% encarnado, a toda costa quiere revertir esas falencias que tiene... Incapacidad para comunicarse, timidez, vergüenza, o estados de agresión, para con otros o para consigo mismo... y entonces piensa que con un tratamiento adecuado va a revertirlo. Pero tal vez tenga la poca fortuna de tener un thetán que está en un plano denso y no está de acuerdo con esa avidez que tiene el ser encarnado de crecer, y hace poco o nada por revertir su situación.

Obviamente el espíritu es uno solo. 10% por un lado, 90% por el otro. Generalmente, generalmente piensan similar. Porque no es que el thetán sea bueno y el 10% perverso o viceversa. Generalmente piensan de la misma manera porque es un solo espíritu. Pero muchas veces, y por suerte, por vivencias agradables que ha tenido ese 10% en vida, se ha creado una persona de bien, y quizás en su plano físico avanza mucho más rápidamente de lo que pudo avanzar en muchísimo más tiempo la parte desencarnada, ese 90%. A veces pasa eso. Por suerte, porque no veamos la parte negativa, si no que veamos la parte positiva, yo soy optimista, así como a veces el 10% encarnado cuando hace actos de crueldad mancha y impregna con esa vibración negativa al thetán, que el thetán desde el plano cuarto, quizás desde un plano maestro se agarra de los pelos, hablo en forma metafórica, ¿no? diciendo, ¡oh! Qué está haciendo este 10% querido mío. ¡Me está tirando, me está jalando hacia abajo! con esa actitud. Pero también se dan los opuestos. También se da que a veces un thetán está en el plano tres, queriendo encontrar su identidad, y el empujón se lo da la parte encarnada. Porque la parte encarnada en muchos casos tiene avidez de crecer. ¿Por qué no tuvo esa avidez cuando era un 100% espíritu? Porque tal vez ese empujón se lo dio alguna situación que ha tenido en vida este 10%, y así como hay espíritus débiles que con determinada situación se dejan estar, caen en decadencia, hay otros espíritus que aceptan ese desafío, como 10% hablo, ¿no? Y buscan salir adelante. Y capaz que son personas de bien, y ayudan, y viven x años, y cuando desencarnan, ese 10% trae una energía tan buena, que ayuda al otro 90% a elevarse. O, aunque no tenga la fuerza suficiente como para elevar el conjunto entero del 100%, esa pequeña sabiduría que trae desde el plano físico ese 10%, le permite al otro 90% comprender cosas que no comprendía.

Ustedes me preguntarán, pero por qué necesita desencarnar para transmitirle la sabiduría, si el thetán, como tiene telepatía, tanto para con sus congéneres como para con el plano físico, puede percibir perfectamente lo que piensa, lo que realiza, lo que crea ese 10%. Pero quién dijo que a veces el thetán no cae en pedantería y subestima al 10%. No estoy generalizando, estoy hablando de episodios aislados. Y cuando ese 10% desencarna ve con satisfacción que se ha formado un 100% espiritual más fuerte a nivel de vibración, más fuerte en amor, a como estaba antes de encarnar.

Pensemos siempre en positivo, no pensemos en negativo en todas las veces. Sabemos que hay espíritus del plano 2 que ni siquiera les interesa encarnar, porque están enroscándose en su crueldad, y a veces si encarnan, encarnan para gozar únicamente los sentidos del plano físico. Pero son tan egoicos, que después cuando tienen alguna dolencia o las cosas no le van bien en lo económico o lo que fuera, se quejan de lo que les ha tocado en suerte, siendo que quizás ellos mismos se lo hicieron eso. Y hay otros que son tan pobres espiritualmente, que eligen estar en una familia muy pudiente, con una fortuna tremenda donde no les falta nada, donde tienen todo lo material que puedan codiciar, y sin embargo se sienten infelices. Porque están tan plenos de todo, tan plenos de todo, que apartaron el amor.

No es fácil. Esas son mis humildes palabras para esta humilde también sesión. Gracias al receptáculo.


Tercera sesión

Estoy aquí comunicado para contar mis problemas, problemas que me afectan como 10% en esta encarnación. Fallas en la comunicación, trastornos en lo personal como sensación de angustia, de ahogo, alguna fobia, y muchos síntomas más que a veces mi 10% no se atreve a sacarlos a relucir para no sentirse un hipocondríaco.

Soy consciente de que como 10% mi parte encarnada busca la felicidad, el salir adelante a nivel afectivo, el salir adelante a nivel personal, y a veces es como que se cae anímicamente por los altibajos que está atravesando, altibajos obviamente solucionables con diálogo, diciendo las cosas en forma sutil.

Yo a nivel de thetán me comunicó con otros maestros que hablan del equilibrio entre la razón y la pasión. Explican que entre todas las facultades que tiene el espíritu y que le transmite al decodificador, el decodificador utiliza lenguaje, la parte física utiliza herramientas, capacidad para modelar su entorno, estructurar la vida. La parte física tiene una cultura, una cultura que en la parte espiritual no es necesaria. Pero con todas esas facultades que el espíritu le da a la parte física, el ejercicio de la razón es la más asombrosa. Ya lo dijo un filósofo encarnado, cuanto más sabemos más cuenta nos damos de que no sabemos. Aún así la razón le ha hecho bajar a la raza humana de los árboles, salir de las cavernas, subir al espacio, sumergirlos en el mar, rodear el satélite y más adelante sacar a la raza del sistema solar, si no se destruye antes.

(suspiro) Es tan difícil el tema del amor, de la amabilidad, de la gratitud; hay sentimientos fuertes tanto positivos como negativos. Los negativos serían el odio, la envidia, las frustraciones. Cuántas veces a nivel afectivo nos echamos en cara cosas; cuántas veces mi 10% por ego ante una burla inocente cree que es una burla afectiva y se enoja con la pareja... es un tema bastante, bastante difícil. Creo que la filosofía nos puede orientar para que hallemos el equilibrio satisfactorio entre la razón y la pasión, refrenando los efectos perniciosos de las pasiones, mientras el ser humano formula principios razonables para vivir de acuerdo a ellos.

Es cierto que la razón puede atenuar la pasión haciendo que la emoción apriete con menos fuerza.

Ya hablé con el maestro Johnakan. El amor personal es una emoción que abreva del ego. Claro que abreva del ego, el ego es lo que alimenta a la pasión (suspiro).

¿Les suena el nombre de Jacques Lenard? Jacques Lenard Duro. Era mi nombre en la encarnación que tuve en Francia. Al igual que muchos seres encarnados en este presente, y yo soy uno de ellos, que ha encarnado más de una vez en Aldebarán cuatro, un mundo de dragones, de seres voladores, similares a algunas películas actuales de este siglo. Muchos de nosotros hemos estado encarnados juntos, por una causalidad, en Francia, a instantes de lo que se llamó la Revolución Francesa, a instantes nada más. Yo era otro de los que luchaban a favor de lo que luego se llamó la igualdad, la fraternidad... Pero ¿qué fraternidad buscaba yo? Porque al igual que cuatro de los roles que están encarnados en este presente, Radael es uno de ellos, en realidad nosotros teníamos una especie revolucionaria porque no queríamos, no queríamos la monarquía, no por defender una igualdad ficticia que en realidad nunca la hubo anteriormente, si no porque nosotros mismos secretamente anhelábamos tener lo que se nos negaba. Porque tú cortabas con la espada a un noble de sangre azul, y excepto que fuera daltónico esa sangre era roja, no era azul.

Entonces, ¿quién te daba los títulos? ¿Quién te movilizaba para decir tú eres conde, tú eres marqués? Tú tienes sangre noble, tú tienes sangre plebeya. Si muchas veces la propia iglesia, quizás no tanto en Francia pero más lo hacía en España, inventaba nombres nobles cristianos, incluso a familias judías para que no fueran perseguidos.

Hubo un gran inquisidor que era de ascendencia judía (suspiro).

Me acuerdo que comíamos perdices en la campiña, tomamos vino de una especie de bota similar a la bota vasca, por la noche nos quedábamos tirados en el pasto, vivimos momentos felices, había una joven, Yvette, delgada, de cutis blanco pero de cabello oscuro, que fue mi amor durante ocho meses. Ella viajó después para el lado de París y no la volví a ver. Se comenta que fue atrapada por soldados monárquicos y la mataron (suspiro). No quise averiguarlo, tenía medios para averiguarlo.

Seguramente ya sabéis que había dos facciones revolucionarias que competían entre sí. Y al igual que pasó con otros amigos, camaradas, compinches de aventuras como les queráis llamar vosotros, yo formé parte de las cuatro personas que fueron secuestradas, con la diferencia que yo estaba más grave que los demás porque con un mosquete había recibido un tiro en el hombro, en el hombro derecho. Fue un pequeño raspón nada más, pero perdí bastante, bastante sangre. Me golpearon en la cabeza, me llevaron al igual que a otros roles en una especie de carromato como celda, era muy similar a la que se usaba muchos siglos atrás por el año 1000, 1100, 1200 en Bretaña. Es igual al que usaban para el año 700 o 800 los irlandeses, cuando raptaban mujeres británicas, era muy similar.

También desperté en una especie de lugar oscuro, húmedo, me sentía como aturdido por la sangre que había perdido. A todo eso del viaje estaba con los ojos vendados, cuando me sacaron las vendas había una oscuridad casi total, no sé como mis secuestradores podían ver porque ni siquiera encendían antorchas. Yo solamente escuchaba ruidos de cadenas, botas caminando pasos, como un lugar donde caía algo de agua, y en ese momento me pusieron lo que tantos engramas me ha causado que es una especie de máscara.

En el presente, en este presente en, en esta actualidad hay un escritor que ha escrito un libro sobre un hermano gemelo de un rey que tenía la máscara de hierro y estuvo muchos años encerrado hasta que fue liberado. En este caso no era una máscara de hierro, era una máscara de cuero muy duro que se ajustaba atrás con una especie de torniquete. Me habían atado con un cuero muy, muy duro con cintas de cuero muy duro las manos en la espalda, no podía ni siquiera sonarme la nariz y yo siempre sufría de alergia, tenía la nariz ufff, completamente tapada. Por suerte no me pusieron nada en la boca y me permitieron de alguna manera respirar por la rendija que tenía la máscara de cuero, pero no podía ver nada. Mentalmente sentía que me sofocaba, era como una tortura. Lo único que escuchaba era el silencio, sssssssss, silencio, silencio, la gota que caía, como una especie de agua en algún lado, a veces movimiento de cadenas... pero era tan opresivo el ambiente, tan opresivo... y la vez que lo que relató otro de los thetanes, me extrañaba no tener nada de hambre, ni sed... angustia era lo que tenía, miedo, terror a la oscuridad. De repente escuchaba ruidos de metal y ya pensaba que me iban a atravesar con una espada, o que un cuchillo me cortaba el cuello. Estaba absolutamente, absolutamente temeroso de mi final (suspiro).

En un momento dado perdí el conocimiento, no supe cuánto tiempo. Luego volvía a estar en estado analítico, o lo que yo creía analítico, lo que yo creía analítico pero no era tal. Hice un racconto, un repaso de lo que era mi vida, salvo Yvette, salvo Loli, que eran dos jóvenes con las que salí, nunca tuve una relación afectiva importante, y eso era una de las cosas que me traumatizaba, eso era una de las cosas que me hacía sentir mal porque pensaba como que, como que el amor no era para mí, y eso también le debe estar afectando actualmente a mi 10% encarnado que a veces tiene altibajos a nivel afectivo, digamos como fallas en la comunicación... Y aquí no se trata de buscar un responsable, de decir sí, es mi 10%, o es el 10% de la pareja, no. Aquí se trata de buscar una solución, y la solución es confrontar, confrontar, no enfrentar, esa es la diferencia. Enfrentar es como una discusión, un diálogo de sordos. Confrontar es poner las cartas sobre la mesa en. Qué hacemos mal, qué hacemos bien. Qué hago yo, qué hace mi 10% encarnado como Sandro, qué hace el 10% de la pareja encarnada como Loren, qué hacen. Hablan, dialogan, o compiten a ver quien está de peor estado anímico (suspiro).

Perdí la noción del tiempo que estuve con esa máscara, al igual que la perdieron otros roles según lo que me conceptuaron los otros thetanes. En ese momento escucho como ruidos, una puerta que se abre. A pesar de tener la máscara se filtra como un poco de luz en mis ojos... Llegó mi final, pensé. Y en ese momento me liberan. Era Marc, era Jacques... ahhh, qué alegría, Jean también estaba. Jean me dijo, yo ya pasé por esto. Ahora fue tu turno, se reía. ¿Cuántos días estuve? Estuviste igual que yo, 16 horas. Sé por otro de los thetanes que otro de los roles estuvo 17 horas, y otro estuvo 15 horas. No sé si es causalidad, si es casualidad, pero a mí al igual que a los otros me parecieron días. Era tal la angustia, tal la inmovilidad...

Dos de mis camaradas murieron, dos quedaron vivos, yo fui uno de los que pudo sobrevivir. No saboreé lo que fue la revolución porque me fui para el lado de España, me fui para la Cataluña. Hablaba un poco el catalán, me defendía bastante. Fui bastante feliz pero siempre me faltó el tener la persona que disipara mi soledad. Uno de los engramas que tengo es el engrama de no sentirme comprendido, no por todo el mundo, y a veces creo que por casi nadie.

No tenéis idea lo que descargué con esta sesión, no tenéis idea como fui desprendiendo capa tras capa como si fuera una cebolla... El núcleo que me ha quedado es mínimo, he descargado infinitamente. Solamente puedo decir gracias.